Saturday

Jody



Decidido, me encaminé a la farmacia con el inquebrantable propósito de invitar a salir a la joven dependiente, en cuya singular belleza ratonil encontraba un aire a Rosanna Arquette en Pulp Fiction.

El establecimiento se encontraba repleto de hipocondríacos hiporománticos.

Tras esperar mi turno una pequeña eternidad ensayando mentalmente el espléndido discurso que llevaba preparado, me acerqué al mostrador donde permanecí sonriendo como idiota a la espera de que la guapa e indignada Jody dejara de luchar con la estúpida caja registradora (al parecer causante que se le hubiese roto una uña) y tuviese a bien atenderme. Levantó la cabeza de pronto y me fulminó con un seco "¡¿Qué quiere?!". Solo atiné a musitar " Seconal, por...favor... ...ah si, si, claro, también ... cafiaspirinas". Me quedó mirando con desdén e inquirió usando una sardónica voz de operadora de call center, "quiere llevar preservativos o vitamina ce en oferta"."Si... es decir no..., gracias", respondí batiéndome en franca retirada.

Al salir, avergonzado por la gran pusilanimidad exhibida, como pobre consuelo parafraseé a media voz a un personaje de La Especulación Inmobiliaria de Italo Calvino: "no era el momento psicológicamente adecuado, se ha visto enseguida".

0 Comments:

Post a Comment

Subscribe to Post Comments [Atom]

<< Home